Tras una intensa lluvia en Trujillo, un cliente nos solicitó revisar la operatividad de su sistema de megafonía, el cual había dejado de funcionar repentinamente. El sistema contaba con aproximadamente 20 amplificadores Bosch Plena y 6 micrófonos, todos conectados a una cabecera analógica que, afortunadamente, seguía operativa. Durante la inspección, detectamos que varios amplificadores no encendían. Procedimos a etiquetar cada unidad inactiva para facilitar el seguimiento. Los amplificadores que sí encendían presentaban fallas en sus botones de selección de canal, lo que impedía el envío de audio de forma convencional. Para agilizar el diagnóstico, utilizamos la entrada auxiliar de cada amplificador y conectamos un dispositivo móvil para reproducir audio. Esta técnica nos permitió identificar rápidamente qué altavoces estaban vinculados a cada amplificador, incluso en una cabecera de gran tamaño. Una vez mapeados todos los amplificadores y altavoces, pasamos a trabajar con el Voice Alarm Controller, el equipo central que gestiona todo el sistema de megafonía. Inyectamos audio por su entrada auxiliar, logrando reproducir sonido en toda el área del cliente, aunque con algunas limitaciones debido al mal estado de ciertos amplificadores. El sistema contaba con micrófonos de dos modelos distintos. Tras realizar mediciones y revisar la conectividad, logramos recuperar la funcionalidad de dos unidades, incluso se podían configurándolas en modo cascada (maestro-esclavo). El sistema de megafonía fue restablecido con éxito, permitiendo al cliente retomar sus operaciones de comunicación interna. Se documentaron las fallas y se recomendó el reemplazo de componentes críticos para asegurar la continuidad del servicio.